EN:
https://www.elnacional.com/opinion/un-puente-entre-espana-y-america-latina/
Destinado a publicar materiales relacionados con la presencia de los Latinoamericanos en el territorio de Estados Unidos, desde que Cristobal Colón descubrió a América en 1492
Una fuerte llamarada del Sol registrada el jueves 28 de octubre ha encendido las alertas, ya que fue lo suficientemente poderosa como para causar una tormenta magnética que deje sin luz y comunicaciones a una gran parte de los habitantes de Latinoamérica.....
EN:
América Latina afronta un noviembre decisivo con un cóctel electoral en el que cinco países -Nicaragua, Venezuela, Argentina, Chile y Honduras- se juegan mantener el actual rumbo político o dar un golpe de timón.....
EN:
En pocas palabras. Javier J. Jaspe
Washington D.C.
La serie que continuamos hoy ha sido inspirada por un importante libro del renombrado autor mexicano, Carlos Fuentes, fallecido en 2012, considerado por muchos como una obra capital para el conocimiento de la historia y cultura latinoamericanas. Me refiero a El espejo enterrado, con el cual Fuentes aporta su luminosa y aleccionadora visión de los primeros 500 años transcurridos desde el descubrimiento de América por Cristobal Colón en 1492. Esta obra fue publicada en su primera edición en México en 1998 y la que utilizamos corresponde a la décimacuarta reimpresión (Taurus bolsillo), junio 2005, 590 páginas.
El objetivo de la serie no es realizar un análisis
de este libro, sino el de aportar breves textos adicionales encontrados en
Intenet, sobre temas y personajes mencionados en el mismo, en las páginas que se
indican entre paréntesis al lado de cada tema o personaje. Otros temas y
personajes podrán agregarse, caso en el cual se mencionará al lado: (jjj). Los
textos de Internet se transcriben en itálicas, en español o inglés, según sea
el caso, con indicación de su fuente. Este octogésimo sexto artículo se refiere
a temas y personajes que van desde Camilo
Henriquez (1769 – 1825) hasta Mariano Moreno (1778 – 1811). Veamos:
Camilo Henriquez (355) – “….Nació en
Valdivia el 20 de julio de 1769. Sus padres fueron don Félix Henríquez y la
señora Rosa González.
Su innegable vocación religiosa lo llevó a
ingresar al convento de San Camilo de Lelis, en la ciudad de Lima, iniciando su
noviciado en esta orden caritativa. Fue ordenado sacerdote en 1790 y profesó en
la orden de la Buena Muerte, congregación dedicada a atender a los moribundos
pobres.
Durante su formación sacerdotal afloró en su
personalidad un gran interés por diversos campos del saber, más allá de la
religión. De este modo y contraviniendo las prohibiciones de la Iglesia estudió
a los filósofos Ilustrados, y profundizó en “El Contrato Social “ de Jean
Jacques Rousseau. Sus superiores al conocer estos deslices intelectuales lo
procesaron por el Santo Oficio de la Inquisición.
Fue castigado y enviado a Quito, donde
comenzaba a gestarse la revolución independentista que llevó a los ecuatorianos
a crear su primera Junta de Gobierno. La violenta represión a la que fueron
sometidos los criollos, le impulsó a escribir una obra de teatro llamada “La
Camila “ o “La Patriota Sudamericana”.
En 1811 logró volver a Chile, entusiasmado
por el proceso político de liberación que vivía el país e inició inmediatamente
su participación política. Redactó la Proclama de Quirino Lemachez, en el que
instaba a los chilenos que se identificaban con las ideas revolucionarias y
cuyo objetivo era formar un Congreso Nacional. Una vez instalado éste, ocupó el
cargo de Diputado suplente por Puchacay. Al inaugurase las sesiones de la
Corporación, Camilo Henríquez sostuvo en el sermón, que la Religión Católica
autorizaba al Congreso para que el país tuviera una Constitución.
El gobierno de Don José Miguel Carrera
entendía que una de las tareas más importantes consistía en la difusión de las
ideas independentistas. Para ello pidió a Camilo Henríquez que creara un
periódico cuya principal misión fuera poner en conocimiento del pueblo la
importancia de su liberación y que la apoyara. De este modo Fray Camilo fundó “La
Aurora de Chile”, que se transformó en el primer periódico que circuló en el
país. Desde sus columnas el fraile instó al pueblo a formar un gobierno
independiente. Las críticas de las autoridades de gobierno no compartieron
estos puntos de vista y pretendieron censurar el periódico. Fray Camilo se
rebeló y en 1813 publicó otro periódico que llamó “El Monitor Araucano”.
En 1811, promovió un plan de organización de
la instrucción pública en el que muchos ven la génesis del Instituto Nacional.
Como muchos de sus compatriotas debió exiliarse en Buenos Aires, donde colaboró
en la redacción de “La Gaceta de Buenos Aires” y en “El Censor”.
Fray Camilo tenía temor de regresar a Chile
por su relación con los hermanos Carrera, pero, O’Higgins reconoció sus méritos
y a su regreso le nombró bibliotecario de la Biblioteca Nacional, encargándole,
además, la edición de dos Boletines, “La Gaceta Ministerial” y otro sobre temas
estadísticos.
Diputado suplente por Puchacay en el Primer
Congreso Nacional de 1811.
Senador en el Senado de 1812, también ocupó
el cargo de secretario el 10 de noviembre de 1812 al igual que en el Senado
Consultivo de 1814.
Diputado por Valdivia en la Convención de
1822, ocupando también los cargos de Secretario y Primer Secretario. Consejero
en el Consejo de Estado de 1823, siendo a la vez Secretario. Diputado suplente
por Valparaíso en la Asamblea Provincial de Santiago de 1823. Diputado suplente
por Chiloé en el Congreso Constituyente de 1823 y Secretario Redactor de
Debates. Diputado por Copiapó en el Congreso de 1824 a 1825. En el desempeño de
este último cargo propuso la edición de un periódico que diera publicidad a las
sesiones del Congreso Nacional.
Falleció en Santiago el 16 de mayo de 1825 y
el Gobierno decretó luto por tres días…..” (https://www.bcn.cl/historiapolitica/resenas_parlamentarias/wiki/Camilo_Henr%C3%ADquez_Gonz%C3%A1lez). También puede verse:
(http://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-564.html);
(https://www.biografiasyvidas.com/biografia/h/henriquez.htm);
(http://www.auroradechile.cl/newtenberg/681/article-2749.html, recopilación bibliográfica realizada por
newtenberg.com);
(https://web.observador.cl/quien-era-camilo-henriquez-considerado-el-padre-de-la-prensa-en-chile/);
(https://historiadevaldivia-chile.blogspot.com/2010/06/fray-camilo-henriquez_14.html, Julo C.Avendaño);
(https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0034-98872010000800020, por Dr. Ricardo Zalaquett S.);
(https://radio.uchile.cl/2015/05/21/presidenta-no-puede-mal-usar-el-nombre-de-camilo-henriquez/, por Matías Sagredo Zaldivar).
Los cabildos (354) – “….El Cabildo fue un organismo representativo de la comunidad, que velaba por el buen funcionamiento de una ciudad y tenía jurisdicción sobre el territorio de la misma. El concejo o cabildo estaba compuesto por los alcaldes o jueces municipales y por los concejales o regidores. El número de los primeros oscilaba de uno, en las pequeñas poblaciones, a dos en las demás; el número de los segundos variaba según la importancia de las ciudades: en villas y pueblos solía haber de cuatro a seis; en las urbes destacadas ocho; en las capitales virreinales, doce o más.
Los alcaldes ordinarios ejercían su mandato por un año, al
igual que los regidores, aunque hubo casos de ciudades con regidores perpetuos
nombrados por el conquistador-fundador o por el propio monarca. Durante los
siglos XVII y XVIII la Corona, por necesidades económicas, vendió estas plazas
al mejor postor.
Además de los alcaldes y regidores, el Cabildo se compuso
de una serie de funcionarios entre los cuales se pueden señalar al alférez real
(heraldo y portaestandarte de la ciudad), el depositario general (de los bienes
en litigio), el fiel ejecutor (inspector de pesas y medidas y de los precios en
tiendas y mercados), el receptor de penas (recaudador de multas judiciales), el
alguacil mayor (jefe de la policía municipal), el procurador general
(representante de los vecinos ante el Cabildo) y un escribano (o secretario que
levantaba acta).
Las funciones del Cabildo iban desde el buen gobierno de la
ciudad, el control del presupuesto y de las rentas del municipio y el correcto
abastecimiento de víveres, hasta la persecución de la delincuencia y la
administración de la justicia local.
El Cabildo trabajaba a través de sesiones, algunas de las
cuales eran públicas y otras privadas. En circunstancias especiales se
efectuaban cabildos abiertos, donde participaban los vecinos más connotados de
la ciudad. Sin embargo, la norma general fueron las sesiones privadas…..”
(http://www7.uc.cl/sw_educ/historia/america/html/1_2_4.html).
También
puede verse:
(https://dle.rae.es/cabildo); (http://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-592.html);
(https://www.noticonquista.unam.mx/amoxtli/702/690);
(https://www.jstor.org/stable/165402, por Francisco
X. Tapia);
(https://revistadehistoria.es/cabildo-en-la-america-espanola/);
(https://refa.org.ar/file.php?tipo=Contenido&id=230, por José Luis
Caño Ortigosa);
(https://definicion.de/cabildo/);
(https://www.gob.mx/inafed/articulos/en-1519-se-creo-el-primer-cabildo-en-la-nueva-espana);
(https://www.tandfonline.com/doi/abs/10.1080/10609164.2018.1481270?journalCode=ccla20. Por María
Luisa Domínguez-Guerrero & José Miguel López Villalba);
Cabildo de Buenos Aires de 1810 (354) – “….El 25 de mayo de 1810 dio origen a un gobierno autónomo y provisorio para tutelar los derechos del monarca español Fernando VII en el virreinato del Río de la Plata. Había sido rey entre marzo y mayo de 1808, luego de disputarle la corona a su padre, Carlos IV. Obligado a abdicar por Napoleón Bonaparte, quien había ocupado España, el emperador colocó en el trono a su hermano José, más conocido como Pepe Botella, por su afición a la bebida. A Fernando VII lo mantuvo cautivo en Valencay, un castillo a 300 kilómetros de París, aislado del mundo. España se quedaba sin rey.
Entre julio
y septiembre aparecerían 18 juntas en España, depositarias de la soberanía del
rey. Cada una disponía de su ejército, pero la imposibilidad de
centralizar el mando provocó que fueran cayendo una tras otra.
Cuando
sucumbió la Junta Central de Sevilla, último bastión de la monarquía española, en
Buenos Aires, tal como ocurrió en otros lugares de la América española, se
sostuvo que el virrey debía renunciar.
Así nacería
la Junta Superior Provisional
Gubernativa de las Provincias del Río de la Plata a nombre del señor Don
Fernando VII. Este organismo basaba su legitimidad en el
principio de retroversión de la soberanía de los pueblos, por estar el rey
Fernando VII cautivo de Napoleón. La Primera Junta juró fidelidad
y lealtad a ese rey, pero aún no se habían puesto sobre la mesa ideas
independentistas, que no entusiasmaban a muchos…..
La frase
que quedó en la historia el día 25, "el pueblo quiere saber qué se
trata", aludía a las discusiones dentro del Cabildo……
A las 3 de la
tarde, con la jura de sus miembros, nacía la Primera Junta de Gobierno.
Su presidente
sería Cornelio Saavedra; secretarios, Mariano Moreno y Juan José Paso; vocales:
Manuel Belgrano, Juan José Castelli, Domingo Matheu, Juan Larrea, Miguel de Azcuénaga
y Manuel Alberti.
Esta semana
pasaría a la historia como la Revolución de Mayo. Lo qué pasó con
ella es otra historia……”
(https://argentear.com/25-de-mayo-1810/);
(https://www.clarin.com/ciudades/cabildo-buenos-aires-historia-monumento-mutilado_0_HJ1F6-fk7.html);
Cancelación de hipotecas religiosas (355) – “….Javier Tusell (Historia de España, Tusquets, 1998) estimó que el proceso desamortizador de bienes eclesiásticos, que tuvo lugar en España durante el siglo XIX, afectó entre un 12 y un 15% del total de la propiedad inmobiliaria. Tal ingente pérdida de propiedades de la Iglesia Católica sólo y únicamente se entiende si se tiene en cuenta la existencia en ese mismo siglo y momento de un auténtico y radical proceso revolucionario. Un proceso de cambio en la titularidad del Poder político, desalojando a unos e instalándose otros, no dentro de una alternancia prevista en las normas constitucionales, sino por rupturas, bien manifiestas de la legalidad cambiada con violencia, bien no tan manifiestas, como las fraudulentas, pero con idéntico resultado: la conquista del Poder. Y un proceso revolucionario que tuvo como factor esencial y desencadenante la invasión napoleónica.
La
revolución con la que comenzó el siglo XIX español fue la conocida como
«revolución liberal», muy estudiada por historiadores como Tomás y Valiente,
Vicente Palacio Atard, Joseph Pérez y el vasco, recientemente fallecido, don
Miguel Artola. Tomás y Valiente, en su manual de Historia del Derecho español, la definió del siguiente modo: «Un proceso
estructural que transformó las bases del Antiguo Régimen y creó las condiciones
jurídicas y políticas necesarias para la constitución de una sociedad dominada
por la burguesía, organizada políticamente bajo la forma de Estado liberal y
caracterizada por la implantación y desarrollo de unas relaciones capitalistas
de producción y cambio». De Miguel Artola es el excepcional doble volumen Los orígenes de la España Contemporánea, publicados en el año 2000.
La
peculiaridad de ese proceso revolucionario, según el profesor Artola, consistió
en que no hubo un cambio en las fuerzas productivas, teniendo lugar dentro de
un sistema económico y exclusivo de carácter agrario. Y por ser esa Revolución
un proceso, tuvo un comienzo en el reinado de Carlos IV y un final discutible,
y por ser agraria, transformó el régimen jurídico de la propiedad de la tierra,
con tres tipos de medidas principales: la abolición del régimen señorial, la
desvinculación de los mayorazgos y la desamortización. Uno de los mejores
estudios de esta última fue de Tomás y Valiente, titulado El marco político de la desamortización en España....
Surge así
el concepto de desamortización, civil y eclesiástica, que, en cuanto concepto
no plantea problemas (no haremos referencia a los importantes aspectos
financieros), siendo sencillo su concepto, pues es la transferencia coactiva de
fincas pertenecientes a las llamadas «manos muertas», de municipios y de la
Iglesia, primero al Estado (llamados Bienes Nacionales) y luego vendidas al
mejor postor en subasta pública. Los complejos problemas de la desamortización
eclesiástica, vendrán, en primer lugar, de su compleja regulación, los R.D.
19/2/1836 (sobre bienes del clero regular) y R.D. 29/7/1837 (sobre bienes del
clero secular y supresión del diezmo), una legislación radical e irreversible
de Mendizábal, Jefe de Gobierno en 1836 y Ministro de Hacienda; y con problemas
por la existencia de una legislación contraria a la desamortización a cargo de
los gobiernos moderados o conservadores, azuzados por la Iglesia durante el
siglo XIX……” (https://www.plataforma-ekimena.org/la-desamortizacion-y-las-inmatriculaciones/, por Ángel Aznarez Fuentes). También puede verse:
(http://www.gibralfaro.uma.es/historia/pag_1872.htm, por Luies Antonio óodenas)
(https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0716-54552008000100009, por Guillermo Herriezuelo Conde); (https://www.requena.es/sites/default/files/files/libro_desamortizacion_alfonso_garcia_completo_21.pdf, por Alfonso García Rodríguez); (http://montesdelacuenca.org/El%20proceso%20de%20desamortizacion%20de%20la%20tierra.pdf, por Francisco Tomás y Valiente); (http://www.economia.unam.mx/amhe/memoria/simposio10/Peer%20SCHMIDT.pdf, por Peer Schmidt); (https://viajesjuridicos.com/2019/05/02/desamortizacion/);
(http://opendata.dspace.ceu.es/bitstream/10637/3377/1/Lecci%C3%B3n%20Magistral%20Fac%20%20Derecho%202011.pdf, por Alfredo García Gárate); (https://www.colmich.edu.mx/relaciones25/files/revistas/134/pdf/carlosCortez.pdf, ;por Juan Carlos Cortés Máximo).
Mariano Moreno (354) – “…..Mariano Moreno (Buenos Aires, 23 de septiembre de 1778 – alta mar, 4 de marzo de 1811) fue un abogado, periodista y político de las Provincias Unidas del Río de la Plata. Tuvo una participación importante en los hechos que condujeron a la Revolución de Mayo y una actuación decisiva como secretario de la Primera Junta, resultante de la misma. Moreno fue el ideólogo de esa revolución, abogado defensor de los derechos de los indios. Fue siempre fiel a sus ideales de liberación e ideología roussoniana aprendidos en la universidad más prestigiosa de la región en la época, la Universidad de Chuquisaca. Moreno fue uno de los que no se dejaron seducir por la princesa Carlota Joaquina, hermana del Rey de España Fernando VII de Borbón y esposa del príncipe Juan de Braganza, de Portugal ya que no consideraba que ella fuera la gobernante adecuada para la independencia de estos pueblos. La ilusión del Carlotismo, de todos modos, le duraría muy poco a los patriotas. Con sus escritos y exposiciones, Moreno contribuyó al desarrollo del libre comercio en el Río de la Plata. Además, en julio de 1810 la Junta lo designó para que redactara un Plan de Operaciones y el proyecto de estrategia política de la revolución, debido a la gran capacidad que Moreno tenía con la escritura y la oratoria.
Mariano Moreno
falleció en alta mar en la madrugada del 4 de marzo de 1811, a bordo de la
fragata inglesa “Fame”, en viaje a Gran Bretaña. Su cuerpo fue envuelto en una
bandera inglesa y arrojado al mar (28° 7’ S, a unos kilómetros de la costa
de Brasil, cerca de la isla de Santa Catarina), tras unas salvas de fusilería.
Según el testimonio
de su hermano Manuel Moreno y de Tomás Guido, sus secretarios y acompañantes en
ese viaje, murió debido a una convulsión producida por una sobredosis de un
medicamento administrado por el capitán del buque: cuando llegaron al gabinete
de Moreno, el capitán sostuvo que le había suministrado cuatro gramos de un
vomitivo de uso habitual en aquella época, elaborado con antimonio y tartarato
de potasa, 40 veces aquella dosis que se conoce como mortal.
Según comentó más
adelante Manuel Moreno:
“…Si Moreno hubiese sabido que se le daba tal cantidad de esa
sustancia, sin duda no la hubiese tomado pues a la vista del estrago que le
causó y revelado el hecho, él mismo llegó a decir que su constitución no
admitía sino una cuarta parte de gramo y que por tanto, se reportaba muerto.
Aún quedó en duda si fue mayor la cantidad de aquella droga u otra sustancia
corrosiva, la que le administró, no habiendo las circunstancias permitido la
autopsia cadavérica. A ello siguió una terrible convulsión, que apenas le dio
tiempo para despedirse de su patria, de su familia y de sus amigos.”
Ambos
testigos conjeturaron posteriormente que fue envenenado por el capitán del
buque, y que la orden habría sido impartida por Saavedra. Pero las fuentes
historiográficas no confirman el hecho, y ni siquiera existe un móvil definido:
para Saavedra, su adversario ya había sido derrotado, y no tenía antecedentes
de hacer matar a sus enemigos. Por otro lado, Mariano Moreno no era un enemigo
de los planes británicos en el Río de la Plata, por lo que tampoco resulta
plausible la idea de haber sido asesinado por orden de la diplomacia
inglesa…..”
(https://argentear.com/mariano-moreno/). También puede
verse:
(https://www.biografiasyvidas.com/biografia/m/moreno_mariano.htm); (https://www.historiadelnuevomundo.com/biografia-mariano-moreno/);
(https://www.elhistoriador.com.ar/mariano-moreno/, por Felipe
Pigna);
(https://comercioyjusticia.info/blog/leyes-y-comentarios/mariano-moreno-y-su-impronta-en-la-argentina-del-presente/, por Ismael
Arce);
(https://repositorio.uca.edu.ar/bitstream/123456789/7074/1/mariano-moreno-construccion-discurso.pdf, por Ariel
Alberto Eiris)(;
(https://www.infobae.com/2016/03/05/1794869-la-misteriosa-muerte-mariano-moreno/, por Juan Thames. Ver también Apéndice abajo)
(https://www.britannica.com/biography/Mariano-Moreno);
(https://www.clarin.com/viva/mariano-moreno-heroe-quisieron-borrar_0_rJpIN3kv-.html);
(http://www.histal.net/personnages/mariano-moreno/, por Virginia
Tray)
Apéndice:
La misteriosa muerte de Mariano Moreno, por Juan Thames - 5 de marzo de 2016
EN: https://www.infobae.com/2016/03/05/1794869-la-misteriosa-muerte-mariano-moreno/
¿Enfermedad o envenenamiento? ¿Fatalidad o conspiración? La trágica desaparición del secretario de la Primera Junta, el 4 de marzo de 1811, es uno de los tantos episodios de nuestra historia convertido en materia de interminable polémica
El polémico secretario de la Primera Junta de Gobierno, Mariano Moreno, murió en alta mar, el 4 de Marzo de 1811 hace 205 años. Ya no integraba el gobierno patrio, pues había renunciado luego de la escandalosa votación del 18 de Diciembre de 1810, en la que se resolvió, contra la voluntad de Moreno, incorporar a los diputados de las Provincias, dando origen así a la llamada Junta Grande.
La hipótesis del
asesinato: "La gran conspiración"
La teoría más
difundida sostiene que Moreno fue asesinado por sus enemigos.
Afirma que agentes de Cornelio Saavedra habrían contratado el pasaje en la
fragata inglesa Fame;
o que espías saavedristas, dirigidos por Pedro Medrano, se habrían
asegurado de que embarcase en la Fame,
en Ensenada.
Para darle un tono
más conspirativo, se sostiene que la Junta Grande, conducida
por Saavedra y por el deán Gregorio Funes,
suscribió, el 9 de febrero de 1812 (pocos días después del embarque de Moreno),
con el comerciante norteamericano David Curtis de Forest un
contrato de provisión de armas para los ejércitos patrios. En el art. 5º de
dicho contrato se preveía que "para poner en ejecución el convenio deberá
Mr. Curtis ponerse antes de acuerdo con el enviado de esta Junta a la Corte de
Londres, señor doctor Mariano Moreno, cuya aprobación será requisito necesario
para que los comprometimientos de Mr. Curtis obtengan los de esta Junta".
El art. 11º del convenio establecía: "Si el señor doctor don
Mariano Moreno hubiere fallecido, o por algún accidente imprevisto no se
hallare en Inglaterra, deberá entenderse Mr. Curtis con don Aniceto
Padilla en los mismos términos que lo habría hecho con el doctor
Moreno". Una cláusula vista como de capciosa naturaleza profética, al
prever la muerte de Moreno.
Manuel Aniceto Padilla había
sido comisionado por la Primera Junta a Londres, desde Setiembre de
1810, para adquirir armamento. Allí se contactó con el legendario general
francés Charles-François du Périer Dumouriez, vencedor de Valmy (1792),
el primer gran triunfo de la Revolución Francesa contra la
Primera Coalición. Más tarde, Dumouriez, ante el riesgo de ser decapitado por
los jacobinos, abjuró de la República y se pasó al bando borbónico. En 1804 se
refugió en Inglaterra; sirvió como consejero del Ministerio de Guerra británico
y se relacionó con la industria de armamentos. Como Inglaterra no podía vender
armas directamente a la Junta para no resentir su alianza con España en la
lucha contra Napoleón, Dumouriez haría los contactos y las armas se venderían a
un particular norteamericano (Curtis) quien las llevaría al Plata.
El 31 de Julio de 1811, muerto Moreno y habiendo
arribado a Londres sus secretarios, Manuel Moreno y Tomás Guido,
éstos advirtieron que las armas adquiridas por Padilla estaban sobrevaluadas y
lo acusaron de "sacar partido de las presentes circunstancias, y (de)
recibir de la corte de Inglaterra una pensión de 300 libras en calidad de
espía", calificándolo además de "bribón, miserable parásito e
intrigante". También descalificaron a Curtis y a Dumouriez, inculpándolos
de "espionaje y quebrantadores de la fe pública". Esto hace suponer a
algunos que, en previsión de que Moreno tomara conocimiento de este
tráfico de armas y se opusiera a convalidar sobreprecios, estos traficantes
conspiraron, en combinación con el saavedrismo, para borrar del mapa al ex
secretario de la Primera Junta.
El Cabildo saavedrista consideró que la
reimpresión del Contrato social de Rousseau ordenada por Moreno era "más
bien perjudicial"
Para reforzar esta tesis, agregan que el Cabildo
saavedrista de Buenos Aires había expresado, en su oportunidad que "la
lectura de la reimpresión del Contrato social de Rousseau ordenada por el
doctor Moreno no sólo no es útil sino más bien perjudicial", sosteniendo
"superflua la compra de 200 ejemplares de la obra"; archivando de
este modo definitivamente el proyecto morenista de difundir la obra rousseauniana
en el Plata.
A ello agregan que, el 2 de febrero de
1811, Guadalupe Cuenca, la mujer de Moreno, recibió en su casa
un paquete sellado con un abanico, un velo y mitones de luto, con un anónimo:
"Mi estimada señora: Como sé que va usted a ser viuda, me tomo la
confianza de remitirle estos artículos que pronto corresponderán a su
estado".
Un testigo dijo haber oído al padre Azcurra
decir: "Ya está embarcado y va a morir"
Tiempo después, la
Asamblea del Año XIII constituyó una comisión para investigar a los Gobiernos
Patrios. En la causa de la muerte de Moreno, Pedro Jiménez, que había sido
oficial de la Secretaría de Guerra cuando el fallecido prócer era su titular,
contó que le sugirió a éste que se refugiara en algún lugar seguro
porque "corrían voces de que se lo quería asesinar". Otros
declararon que Moreno habría renunciado a la Junta por temor a que se lo
matase. El testigo Juan Madera declaró haber oído en Oruro (Alto Perú) al padre
Azcurra decir, sobre Moreno: "Ya
está embarcado y va a morir". Finalmente, el otro argumento que da
sustento a esta tesis es que la fragata Fame sí habría retornado a Buenos Aires, pero jamás lo hizo
su capitán, George Stephenson, lo que revelaría su participación en la trama
del asesinato.
La refutación de
la tesis conspirativa
Son varios los
argumentos esgrimidos contra la tesis antes expuesta. Cornelio Saavedra
no era un hombre sanguinario, ni vengativo. La única sentencia de muerte
que firmó (y a regañadientes) fue la de Santiago de Liniers. No era
su estilo matar adversarios. Ya había triunfado políticamente sobre
Moreno, y se lo había sacado de encima, cuando éste renunció
voluntariamente a la Junta y pidió ser enviado a Londres. No tenía sentido
matarlo. Es falso que Saavedra o sus agentes hubieran contratado el pasaje de
Moreno en la Fame.
Fue el mismo
Mariano quien decidió embarcarse en esa fragata, y rechazó los ofrecimientos de
su amigo Robert Ramsay, comandante de la goleta de guerra británica Mistletoe, de conducirlo en esta
nave, más ágil y mejor protegida, hacia Río de Janeiro, y desde allí hacia
Londres. Ramsay desembarcó a Moreno en el puerto de Ensenada, para trasbordar a
la fragata mercantil Fame.
A bordo lo esperaban sus secretarios: su hermano Manuel y Tomás Guido. No
obstante ello, Ramsay lo escoltó hasta que la Fame salió del Río de la Plata y rumbeó por el Atlántico,
hacia Río.
Moreno no viajó a Londres a comprar armas, sino a gestionar
respaldo para la Revolución
El hecho de que
espías saavedristas hubieran observado su partida sólo significa que se
aseguraron que Moreno no hubiera cambiado de opinión. La misma Junta Grande le
había pedido a Ramsay proteger a Moreno de un abordaje realista. De haber
querido matarlo, era más fácil dejarlo a merced de la escuadra de Montevideo.
La estrafalaria idea del tráfico de armas
Moreno no viajó a Londres a comprar armas, sino
a gestionar respaldo para la Revolución. En el camino, la Junta Grande le
encomendó que supervisara la compra de armas. De haber sido Moreno un
obstáculo para este negocio, ni siquiera lo hubieran designado para tal fin, toda
vez que la Junta ya contaba para ese rol, en Londres, con Aniceto Padilla. La
previsión de que, en caso de muerte o imposibilidad de Moreno, el contratista
se entendiera con Padilla, no hace más que considerar una posibilidad concreta
y común en la época: que el navío naufragara, u ocurriera alguna eventualidad
que le impidiera actuar al enviado. Éste nunca había gozado de salud rozagante.
Un viaje transatlántico demoraba tres meses: no
había posibilidad material de conspirar de ese modo
Además, el lapso que medió entre la renuncia de
Mariano a la Junta y su designación como embajador (fines de diciembre de
1810), y su partida (mediados de enero) hacía imposible confabular a
todos los miembros de la supuesta trama: Dumouriez y Padilla, en Londres,
Saavedra y Funes, en Buenos Aires, y Curtis, cuya presencia se
registra en la Capital, en febrero de 1811, cuando la Fame ya había partido. Un viaje
transatlántico demoraba unos tres meses, por lo cual no había posibilidad
material de conspirar de ese modo. En Londres no se sabía aún que Moreno había
sido designado representante, cuando éste murió; y, salvo que los hipotéticos
conspiradores fueran adivinos, nadie sabría cómo iría a reaccionar ante el
contrato de provisión de armas, que estaba yendo –supuestamente- a desbaratar.
La oposición del Cabildo a la impresión
del Contrato Social de
Rousseau, fue una simple decisión, explicable porque los regidores veían las
ideas de la Revolución Francesa lesivas al sentir religioso del pueblo. Por
otro lado, la trama de amenazas y anuncios de pronta muerte se explican por el
alto grado de agresividad y de conflicto político entre morenistas y
saavedristas al que se había arribado entre 1810 y 1811. El mismo
Saavedra contó que Moreno pretendía encarcelarlo y ajusticiarlo. Mariano,
por su carácter, tenía muchos enemigos que no dudarían en amenazarlo,
sabiéndolo alejado del gobierno. Amenazas cruzadas invocando la muerte de
Moreno y Saavedra (los líderes de los dos bandos enfrentados) eran moneda
habitual en la época.
El Capitán del Fame
Que el capitán de la Fame nunca haya retornado a
Buenos Aires, no tiene por qué significar que fue parte de una conspiración. El
Plata era por entonces un destino marginal en la navegación mundial. No
teníamos puertos de gran movimiento, como los europeos, los de América del
Norte, el Caribe, Australia, África o la India. Además, se trataba de un
oficial sin lazos ni intereses en el Plata, como para que se prestase a
participar en alguna conspiración local, en la cual no tenía arte ni parte
alguna.
Ambos apuntaron siempre a una única e
imprudente dosis de emético que le suministró el capitán
Ni Tomás Guido, ni Manuel Moreno acusaron a Saavedra, ni a nadie, de la muerte del prócer. Ni siquiera cuando aquel cayó en desgracia. Ambos apuntaron siempre a una única e imprudente dosis de emético que le suministró el capitán (y no una serie de aplicaciones como erróneamente dicen algunos, creyendo que se trató de un envenenamiento progresivo).
En la época no había tantos médicos; tampoco
había muchas Facultades de Medicina en el mundo. No todos los barcos tenían
médicos. De hecho, el Fame carecía
de un facultativo a bordo. A falta de profesionales, el propio capitán disponía
de un modesto botiquín, donde según su experiencia y su pobre saber o entender,
aplicaba una u otra solución al pasaje que se enfermaba. Moreno siempre tuvo
una salud endeble, y en ocasiones estuvo al borde de la muerte. Ante los
síntomas de descompostura que refería, el capitán debió haber pensado que con
un fuerte vomitivo, solucionaría sus malestares. Sin embargo, fue peor el
remedio que la enfermedad, y el pobre agonizó durante tres días, hasta
perecer, "a los 28º 07' Sur en la madrugada del 4 de Marzo de 1811",
"en los 32 años 6 meses y un día de edad", como consignara su
hermano.
Habían transcurrido 38 días de zarpar; y hacía bastante tiempo que la calma chicha había afectado al buque, que permanecía casi inmóvil, por falta de vientos. Por eso fue imposible que la fragata se dirigiera a otro destino, como pretendía Manuel Moreno. El ex secretario de la Primera Junta falleció casi enfrente de la Isla de Santa Catalina; hoy destino favorito de muchos argentinos, para vacacionar….” (También pueden verse enlaces sobre Mariano Moreno arriba).
El director para América de Human Rights Watch alerta sobre la situación de la región, en manos de cada vez más líderes autoritarios....
Un continente donde la democracia es más estable, con excepciones como la de Venezuela, pero en el que los problemas han cambiado. Panorama país a país, a 30 años del nacimiento del GDA....
Las amenazas de nuevas olas de contagio, el aumento de la inflación y las tasas de interés, sumado al endeudamiento del último año, son vientos en contra que podrían afectar la recuperación de la actividad económica impulsada por los planes de vacunación y reducción de las restricciones de circulación....
Por Nicolás Abrew, ejecutivo principal de comunicación en CAF.
Visiones del desarrollo es una sección promovida por CAF -banco de desarrollo de América Latina- que analiza los principales temas del desarrollo de la región. Los artículos que contiene se publican simultáneamente en los principales medios de América Latina.
EN:
https://www.elnacional.com/visiones-desarrollo/como-llevar-a-las-pymes-a-buen-puerto/
En pocas palabras. Javier J. Jaspe
Washington D.C.
La serie que continuamos hoy ha sido inspirada por un importante libro del renombrado autor mexicano, Carlos Fuentes, fallecido en 2012, considerado por muchos como una obra capital para el conocimiento de la historia y cultura latinoamericanas. Me refiero a El espejo enterrado, con el cual Fuentes aporta su luminosa y aleccionadora visión de los primeros 500 años transcurridos desde el descubrimiento de América por Cristobal Colón en 1492. Esta obra fue publicada en su primera edición en México en 1998 y la que utilizamos corresponde a la décimacuarta reimpresión (Taurus bolsillo), junio 2005, 590 páginas.
El objetivo de la serie no es realizar un análisis
de este libro, sino el de aportar breves textos adicionales encontrados en
Intenet, sobre temas y personajes mencionados en el mismo, en las páginas que se
indican entre paréntesis al lado de cada tema o personaje. Otros temas y
personajes podrán agregarse, caso en el cual se mencionará al lado: (jjj). Los
textos de Internet se transcriben en itálicas, en español o inglés, según sea
el caso, con indicación de su fuente. Este octogésimo quinto artículo se
refiere a temas y personajes que van desde el Barón de Montesquieu (1689 –
1755) hasta Juan Jacobo Rousseau (1712 – 1778). Veamos:
Montesquieu (348, 373 ) – “….Charles
Louis de Secondat, Barón de la Brède y de Montesquieu, fue uno de los personajes más
influyentes en cuanto al apartado político de la Ilustración. Ejerció de filósofo,
escritor y político durante su vida, pero su verdadera influencia sucedió en
los movimientos sociales liberales que se produjeron
tras su muerte. Fue el padre de la separación de poderes y
de las teorías que ahora son la base de cualquier Constitución
moderna.
Montesquieu nació
el 18 de enero de 1689 en el castillo de la Brède, cerca de Burdeos (Francia),
en el seno de una familia de magistrados bordeleses. Sus padres le ingresaron
en el colegio de oratorianos católicos Juilly y, posteriormente, siguió con la
tradición familiar para estudiar Derecho. En esta etapa,
estuvo en la Universidad de Burdeos y en la de París, donde entró en contacto
con los círculos de intelectuales parisinos.
En 1714,
Montesquieu regresó a Brède y allí fue canciller del parlamento de Burdeos.
Debido a la muerte de su padre, pasó a estar a cargo de su tío, el barón
de Montesquieu, de quien en 1716 recibió en herencia su fortuna, sus
títulos y su cargo de presidente del parlamento bordelés.
También en esta época fue nombrado miembro de la Academia de
Ciencias de Burdeos, donde destacó por sus informes acerca de temas
históricos, como por ejemplo su “Disertación sobre la política de los
romanos” (1716), y científicos, con “El eco” y “Las enfermedades
renales” (1718).
La situación
política internacional y nacional de aquellos años estuvo marcada por la proclamación
de una monarquía constitucional en Gran Bretaña y por la muerte
de Luis XV. Estos eventos influyeron de forma determinante en Montesquieu,
quien centró su análisis en el estudio de los fenómenos sociales.
Mediante el éxito de las “Cartas persas” (1721), consiguió hacerse un
hueco en los salones parisinos, que frecuentó asiduamente sin dejar por ello de
administrar su propiedad familiar ni de escribir. Así surgió su libro “El
templo de Gnido” en 1725.
Sin embargo, en
1726 vendió su cargo y, poco después de su elección como miembro
de la Academia Francesa (1727), emprendió un viaje por Austria,
Italia, Alemania, Países Bajos y Gran Bretaña. Sus notas de viaje las recogió
en unos cuadernos que se publicaron en 1899 bajo el título “Mis
Pensamientos”.
Estas anotaciones,
junto con sus reflexiones acerca de la historia, inspiraron su ensayo “Consideraciones
sobre las causas de la grandeza y de la decadencia de los romanos” (1734),
que muchos consideran la transición hacia su obra magistral en
la que trabajó catorce años: “El espíritu de las leyes”
(1748). Este libro tuvo 22 ediciones en 2 años y suscitó violentas críticas,
tanto por parte de los jesuitas, como por parte de los jansenistas. La Sorbona
y la Iglesia católica lo prohibieron y fue incluido en el Índice
de Libros Prohibidos.
Los últimos años
de su vida se vieron empañados por una ceguera casi total. Sólo pudo escribir
una novela de ambiente oriental, llamada “Arsace et Isméinie”, y el
artículo “Gusto” para la
Enciclopedia de Diderot. Aunque su
relación con los enciclopedistas era buena, se mantuvo bastante
distante e independiente. Finalmente, el 10 de febrero de 1755
falleció en París y fue enterrado en la iglesia de Sanit-Sulpice.
Montesquieu sentó
las bases de las ciencias sociales y económicas y participó
en el origen de las doctrinas constitucionales liberales,
que se basaron en su teoría de la separación de poderes. Influyó de gran forma
en las colonias británicas de América, especialmente en la Guerra de
Independencia Estadounidense y en la Constitución que realizaron allí…..”
)https://redhistoria.com/biografia-de-montesquieu/,
por Víctor Muñoz Fernández)/ También puede verse:
(https://www.biografiasyvidas.com/biografia/m/montesquieu.htm);
(https://confilegal.com/20180826-quien-montesquieu-padre-del-invento-la-division-poderes/, por Carlos
Berb ell y Yolanda Rodríguez);
(https://loff.it/society/efemerides/montesquieu-filosofo-escritor-y-politico-frances-178814/, por Mathias
Weise);
https://wsimag.com/es/cultura/62226-montesquieu-y-la-ilustracion, por Juan
Jaramillo Antillón);
(https://www.britannica.com/biography/Montesquieu);
(https://www.celeberrima.com/quien-fue-montesquieu-biografia-corta-aportaciones-y-obras/);
Voltaire….(348, 349, 350, 354) – “….François-Marie Arouet, más conocido por su seudónimo «Voltaire», fue un escritor y filósofo francés de los siglos XVII y XVIII (nació el 21 de noviembre de 1694 y murió el 30 de mayo de 1778 a los 83 años) recordado hoy principalmente por:
– Ser
uno de los principales representantes de la Ilustración.
– Inspirar
con su legado filosófico movimientos sociopolíticos como la Revolución
francesa.
– Defender
el valor de la tolerancia y la libertad frente a
los fanatismos y dogmatismos
propios de la época (principalmente
religiosos)……
François-Marie
Arouet nació el 21 de noviembre de 1694 en el seno de una
familia de la baja nobleza francesa.
Asistió al
colegio jesuita Louis-le-Grand hasta los 17 años,
cuando, por petición de su padre, empezó a estudiar derecho. Dos años más tarde
recibió un contrato de secretario en la embajada francesa de La Haya, pero
sería expulsado poco después debido a un idilio con la hija de un refugiado
francés.
En 1715, con 21
años, fue encarcelado en la Bastilla por escribir una sátira contra el duque
de Orleáns —por aquel entonces, cabeza en el poder del estado
francés— y su hija la duquesa de Berry. Tras un año de reclusión,
fue desterrado a Châtenay-Malabry —al suroeste de París—, donde adoptó el
seudónimo de Voltaire.
Allí compaginó
sus intereses literarios con una variedad de oficios que le reportaron éxito y
dinero, pero volvería a acabar en la cárcel en 1726, esta vez por una disputa
con el noble De Rohan, con el que había sostenido un altercado en
competencia por una dama. Cinco meses más tarde, consiguió ser liberado a
condición de exiliarse en Londres, tierra donde fermentaría la orientación de
su pensamiento.
En 1728 Voltaire
regresó a Francia para difundir las ideas del científico Isaac Newton y el
filósofo John Locke en sus famosas Cartas filosóficas o Cartas
inglesas, pero el contenido de sus obras y su severa crítica al fanatismo
y dogmatismo de las religiones en defensa de la tolerancia religiosa y la
libertad de pensamiento, le forzarían a vivir en un continuo exilio.
Finalmente, ya
pasados los sesenta, se estableció en el municipio de Ferney (actualmente
denominado Ferney-Voltaire en su honor), en la frontera con
Suiza, donde permanecería la mayor parte de las dos últimas décadas de su vida
aumentando su legado literario y filosófico.
En 1778 volvió a París como una celebridad y fallecería el 30 de mayo de ese mismo año en la ciudad que le vio nacer a los 83 años de edad……” (https://www.saberespractico.com/biografias-resumidas/voltaire/#:~:text=Fran%C3%A7ois%2DMarie%20Arouet%2C%20m%C3%A1s%20conocido,principales%20representantes%20de%20la%20Ilustraci%C3%B3n.). También puede verse:
(https://redhistoria.com/biografia-de-voltaire/, por Víctor Muñoz Fernández);
(http://www.apostadigital.com/revistav3/hemeroteca/oneca3.pdf,
por Iñaki Oneca Arruguza);
(https://www.youtube.com/watch?time_continue=2&v=laeLzSjQgho&feature=emb_logo, deynez82);
(https://www.bbc.com/mundo/noticias-42446756,
por Redacción).
Invasión británica de Buenos Aires (352) – “….El 25 de junio de 1806 más de mil quinientos ingleses desembarcaron en la costa de la actual ciudad de Quilmes con el fin de invadir Buenos Aires. Las disposiciones defensivas del virrey Sobremonte resultaron una burla para el avance del general William Beresford, quien encabezaba la expedición inglesa. Cuando las tropas británicas cruzaron el Riachuelo, Sobremonte huyó hacia Córdoba y Buenos Aires quedó bajo gobierno inglés durante casi dos meses.
Mientras tanto,
desde Montevideo, el capitán de navío Santiago de Liniers organizaba las
fuerzas para reconquistar Buenos Aires. La expedición al mando de Liniers salió
el 3 de agosto. En su trayecto, fue sumando más milicias, algunas de ellas de
los desbaratados intentos previos de reconquistar la ciudad. El 10 de agosto,
desde los Corrales de Miserere (hoy Plaza Miserere), Liniers intimó a Beresford
a rendirse, dándole un plazo de quince minutos. El general inglés respondió que
….defendería su posición. Pronto empezaría el combate. El 10 de agosto las
tropas al mando de Liniers derrotaron a la guarnición inglesa del Retiro, y al
amanecer del 12, entraron por las actuales calles Reconquista, San Martín y
Florida. La lucha alcanzó entonces una ferocidad inusitada y los ingleses
fueron forzados a retroceder hacia el Fuerte, donde no tardarían en rendirse….. (https://www.elhistoriador.com.ar/la-invasion-inglesa-de-1806-y-la-reconquista-de-buenos-aires/).
...... La segunda invasión, mejor preparada, ocurrió en mayo de
1807, bajo las órdenes del Teniente General John Whitelock. Tras un par de días de fuertes enfrentamientos en las calles
de Buenos Aires, los británicos se rindieron frente a un ejército al que no
habían considerado más que una muchedumbre.
Los británicos
perdieron más de la mitad de sus hombres. El 7 de julio, luego de firmar el
cese el fuego, partieron rumbo a Gran Bretaña, donde Whitelock enfrentó una
corte marcial y fue dado de baja.
Las guerras suelen
definir a una nación. Al igual que Estados Unidos se hizo adulta en 1776,
cuando los colonos declararon su independencia de la corona británica, en 1807
Argentina sintió que se había ganado el derecho a ser independiente al repeler
a un invasor por sus propios medios.
Tres años después
de la segunda invasión, en Buenos Aires surgió un gobierno independiente, lo
cual marcó el preludio de lo que sería su declaración formal de independencia
en 1816.
Este hecho ayudó a desencadenar otros procesos independentistas en América del Sur, que terminó con la dominación española de la región en 1826…..” (http://news.bbc.co.uk/hi/spanish/misc/newsid_4781000/4781831.stm). También puede verse.:
(https://www.elconfidencial.com/alma-corazon-vida/2016-10-01/ataque-buenos-aires-espana-inglaterra_1268624/, por Álvaro Van
Den Brule);
(https://www.researchgate.net/publication/235930394_La_Invasion_Britanica_al_Rio_de_la_Plata_1806-1807, por Harnish
Lain Stewarrt);
(http://www.laizquierdadiario.com/Las-Invasiones-Inglesas-Cuando-Buenos-Aires-fue-colonia-britanica, por Hernán
Perriere);
(https://www.britishempire.co.uk/article/granbretanaargentina.htm, por Gordon
Bridger);
(http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1405-22532020000100003&lng=es&nrm=iso, por Mariano M.
Schlez);
(https://www.buenosaires.gob.ar/sites/gcaba/files/documents/invasiones_inglesas.pdf, Instituto
Histórico de la Ciudad de Buenos Aires; prologo por Lic. Liliana Barela)
Virrey Sobremonte (352) – “….Rafael de Sobremonte nace en la ciudad española de Sevilla, en 1745. A los catorce años inicia una ascendente carrera militar, que lo llevará a ser designado secretario del Virreinato del Río de la Plata con el grado de teniente coronel, en la época del virrey Vértiz (1779). Luego fue nombrado gobernador de la Intendencia de Córdoba, cargo que ejerció durante más de 15 años, demostrando buenas aptitudes como administrador. En el año 1804 asume el cargo de virrey del Río de la Plata. Desde 1805, tiene noticias de la posible llegada de tropas inglesas en cualquier momento. Cuando eso se hace efectivo y los ingleses invaden Buenos Aires en junio de 1806, la ciudad no estaba preparada militarmente para rechazar este ataque. Luego de la Reconquista de la ciudad, el Cabildo Abierto del 14 de agosto de 1806 le quita el mando militar de la ciudad, nombrando a Santiago de Liniers en el cargo. Abucheado por la población de Buenos Aires, Sobremonte se dirige a Montevideo. En enero de 1807 los ingleses atacan la Banda Oriental del Río de la Plata. En las cercanías de Montevideo, las tropas de Sobremonte son nuevamente derrotadas por los ingleses. Cuando en Buenos Aires se conoce la noticia de la caída de Montevideo y la actuación del virrey, una multitud se dirige a la Plaza Mayor (actual Plaza de Mayo) y solicita su destitución. El 10 de febrero de 1807 se reúne en el Fuerte una junta general integrada por autoridades y los principales vecinos, donde se decide la destitución y el arresto del virrey. En 1809 regresa a España donde es sometido a un consejo de guerra, que lo absuelve de todos los cargos en su contra…..” (https://www.buenosaires.gob.ar/sites/gcaba/files/documents/invasiones_inglesas.pdf, Instituto Histórico de la Ciudad de Buenos Aires; prologo por Lic. Liliana Barela, página 35). También puede verse:
(https://www.elhistoriador.com.ar/el-pueblo-destituye-al-virrey-sobremonte-y-nombra-a-liniers/);
https://pulperiaquilapan.com/sobremonte-virrey-en-fuga/, Pregonera
Rocío Arreal
(https://www.laguia2000.com/america-hispanica/virrey-rafael-de-sobremonte, publicado por
Pedro);
(https://www.elentrerios.com/opinion/cmo-se-acuerdan-de-sobremonte.htm, Juan Roca)
Santiago Liniers (352) – “…..Hay un personaje de nuestra historia patria que puede decirse, que tuvo dos roles y que finalmente -por elección o por cumplimiento de su deber- terminó en el bando de los supuestos "malos". Tan es así que lo fusilaron. Santiago de Liniers, fue el penúltimo Virrey del Río de la Plata. Gobernó de 1807 a 1809.
Había nacido en Francia. Ya conocía estas tierras, pues como oficial naval, con
sólo 20 años había acompañado al futuro Virrey Ceballos al Río de la Plata,
regresando luego a España.
Quiero enumerar algunos aspectos positivos de su tarea y luego los
supuestamente negativos para la causa patriótica, que decidieron su tan
discutida condena a muerte.
Le generó una
alta y merecida popularidad su lucha -recordemos que era un jefe naval de
carrera- durante la defensa de Buenos Aires en 1806 en la primera Invasión
Inglesa y luego de la derrota criolla, en la Reconquista de la Ciudad, en 1807.
Esta tarea,
unida a la falta de capacidad del Virrey Sobremonte, hizo que los vecinos de
Buenos Aires, comprendiesen que necesitaban otra autoridad que los gobernase. Y
en diciembre de 1807, se eligió como Virrey a Santiago de Liniers.
Los criollos lo consideraban el símbolo de la victoria frente a los ingleses.
Gobernaría hasta junio de 1809 en que lo reemplazó el Virrey Cisneros.
Sucedió que Napoleón había tomado España y nuestra región, ya no dependía de
los soberanos españoles sino de Francia. Y Liniers, es sabido, era francés.
Se empezó a sospechar de su imparcialidad, pese a que él se negó a reconocer a
José Bonaparte como Rey de España.
Finalmente
destituido y ocupó su lugar como ya lo mencione, el Virrey Cisneros que
gobernaría hasta el 23 de mayo de 1810, en que lo sustituyó la Primera Junta
que asumió el 25 de mayo. Los acontecimientos se precipitaban.
¡Quién pudiera
saber, a casi dos siglos, cual sería el porque del enfrentamiento de Liniers
con el primer gobierno Patrio!. El ya había demostrado sobradamente su cariño
por esta tierra. Pero quizá su sentido del honor le recordaba que había jurado
ser leal a España.
El hecho
concreto, es que se dirigió a Córdoba. Versiones que tienen cierta
verosimilitud opinan que estaba dispuesto a encabezar una contra revolución
contra el primer gobierno patrio, que no podía aceptar tal posición.
La Junta ordenó
entonces su captura y tropas patriotas se dirigieron a Córdoba en su busca. Lo
encontraron en luna región llamada Cabeza de Tigre o Cruz Alta. En un juicio
sumario se decidió su fusilamiento. Y en un descampado, fue ejecutado en la
madrugada del 26 de octubre de 1810 junto a otros ilustres ciudadanos,
equivocados o no.
Fue la primera sangre que se derramó y a solo tres meses de su logro, como
respaldo a la Revolución del 25 de Mayo de 1810…..
Esta líneas han
querido ser simplemente una reflexión sobre la lealtad y el deber moral. Porque
Liniers debía obediencia a España. Pero también -por una ley no escrita-v tenía
una deuda espiritual con los criollos de esta patria renacida que habían
confiado en él. Esta incógnita, ya no podrá develarse.
Nos queda de su
figura discutida, su fervor inicial por nuestra causa y posteriormente, su
adhesión a sus principios y a su deber.
Y un aforismo final para Santiago de Liniers: "Los principios sanos
resisten todas las enfermedades"…..”
(http://www.laprensa.com.ar/480086-Santiago-de-Liniers.note.aspx,
por José Narosky). También puede verse:
(https://www.todoababor.es/articulos/bio_liniers.htm);
(https://www.historiadelnuevomundo.com/biografia-santiago-liniers/);
(https://www.biografiasyvidas.com/biografia/l/liniers.htm);
(https://www.biografiasyvidas.com/biografia/l/liniers.htm);
(https://todoavante.es/index.php?title=Liniers_y_Bremond,_Santiago_de_Biografia)
Beresford (352) – “…Beresford, William Carr, vizconde de (1768-1854)….General inglés nacido el 2 octubre de 1768 y muerto en Bedgebury (Kent) el 8 de enero de 1854. Ostentó los títulos de conde de Trancoso, marqués de Campomayor, y vizconde de Beresford. Hijo bastardo del primer marqués de Waterford, escogió la carrera de las armas, trasladándose en 1785 a Estrasburgo a estudiar en su academia militar. Pese a que en un accidente perdió la vista del ojo izquierdo, participó en varias campañas contra la Revolución francesa, desempeñó cargos en Egipto y en el Cabo de Buena Esperanza, tomó Buenos Aires, el 27 de junio de 1806, con sólo mil hombres.
El 4 de agosto de 1806 lanzó un Manifiesto,
conjuntamente con Sir Home Popham, en el que invitaba a los comerciantes
y armadores de su país a aprovecharse del vasto mercado de la América del Sur,
que esta conquista les proporcionaba; pero poco después tuvo que capitular al
frente de sus tropas, siendo hecho prisionero, aunque logró escapar, volviendo
a Inglaterra en 1807. Durante la Guerra de la Independencia fue nombrado
generalísimo del ejército portugués, al que trató de infundir una disciplina de
hierro. Luchó en España a las órdenes de Wellington. Una carta suya, fechada en Coimbra el
29 de mayo de 1809, a la Junta superior de Badajoz, con noticias de la guerra,
publica el Diario Mercantil de
Cádiz, número 164, del 16 de junio de 1809. Y su oficio a Miguel Pereira
Forjaz, dado el 31 de agosto de 1810, sobre la pérdida de Almeida, el 14 de
septiembre de 1810.
Sustituyó a Hill en 1811, cuando éste tuvo que retirarse por enfermedad. El
propio año 1811 se le dio en España el grado de capitán general de Infantería,
como consecuencia de su papel dirigente en la batalla de Albuera, lo que le
valió al acabar la guerra el título de lord Beresford of Albuera; aunque sus métodos, desde el punto de
vista militar y político, dejaban mucho que desear. Wellington pensaba de él
que era un buen organizador, pero no un buen general.
Un decreto suyo, fechado el 13 de marzo de 1814, de premios al ejército
portugués, por su conducta en la batalla de Vitoria, se publica en El Fernandino, de Valencia, de los
días 19 y 20 de abril de 1814. Ejerció en Portugal funciones de procónsul,
persiguiendo sañúdamente toda veleidad liberal, lo que por contragolpe
contribuyó a la revolución portuguesa de 1820 -forma de librarse de la
humillación que el general inglés representaba. Este, en dos ocasiones, se
trasladó a Rio de Janeiro, a recabar más poderes: 1817 y 1819.
En su segunda ausencia estalló la revolución, por lo que a su vuelta a Lisboa
en octubre de 1820 no se le permitió siquiera desembarcar. Un soneto,
expresando el sentimiento nacional, le calificaba sin paliativos de "filho
de puta".
Su correspondencia con Wellington en 1820 es una buena muestra de la
preocupación reaccionaria que ambos sentían por la revolución de la Península.
Beresford todavía volvió a Portugal en 1826, pero tampoco en esta ocasión se le
permitió tomar el mando del ejército. Casó en 1832 con su prima Louisa (que ya
era viuda de Thomas Hope), y vivió el resto de su vida rodeado de honores.
Había recibido las grandes cruces de San Hermenegildo y San Fernandoen 1815 y
los títulos portugueses de conde de Trancoso y marqués de Campomayor, aparte de
otras distinciones. Hasta su muerte, en las Guías españolas figura siempre su nombre a continuación del
de Wellington…..”
(http://www.mcnbiografias.com/app-bio/do/show?key=beresford-william-carr-vizconde-de). También puede
verse:
(http://dbe.rah.es/biografias/13695/william-carr-beresford);
(https://www.buenosaires.gob.ar/cultura/patrimonio-de-la-ciudad/investigaciones/primera-invasion:
(https://www.britannica.com/biography/William-Carr-Beresford-Viscount-Beresford);
Juan Jacobo Rousseau (348, 354, 385) – “….Jean-Jacques Rousseau nació el 28 de Junio de 1712 en Ginebra, Suiza y falleció en Ermenonville, Francia, el 2 de julio de 1778.
Fue escritor, filósofo,
botánico, naturalista y músico de la ilustración, a pesar de las profundas
contradicciones que lo separaron de los principales representantes del
movimiento. Sus primeros años de vida, de especial dureza, marcaron su
existencia y su pensamiento. Debido a motivos religiosos, la familia Rousseau
se exilió a Ginebra cuando era una ciudad-estado independiente….. A Jean-Jacques
Rousseau se le considera como el representante típico del tratamiento
individual en la educación. Su alumno se educa solo con un preceptor, sus fines
educativos no son individuales, sino también sociales, diferentes a los de la
educación dada en su tiempo, en contra de la cual se manifestaba. La
vuelta a lo natural fuera de convencionalismos sociales, es la clave de la idea
de la educación de Jean-Jacques Rousseau. La naturaleza es lo primitivo y valioso, lo
esencial de la Especie Humana….. La educación del niño debe comenzar
desde su nacimiento y debe impedirse que adquiera hábitos de los cuales
pudiera llegar a ser esclavo. La educación religiosa, no debe ser confesional y
debe realizarse, no en la infancia, sino en la edad de la razón. En su libro
“El Contrato Social”, rescata la necesidad de las personas, durante toda su
vida, de consejo y guía. En su texto "El Emilio", atacó al sistema
educativo de su época, pues mantiene que los niños deben ser educados a través
de sus intereses y no por la estricta disciplina.
Dado su alejamiento de los enciclopedistas de la época y su
enfrentamiento con la Iglesia Católica, por sus polémicas doctrinas, su estilo
literario cambió. Sus obras autobiográficas dieron un vuelco fundamental en la
literatura europea; a tal punto que es considerado uno de los precursores del
Romanticismo. Las obras suyas que más influyeron en su época fueron Julia,
o la Nueva Eloisa (1761) y Emilio, o De la
educación (1762), ya que transformaron las ideas sobre la familia.
Otras obras muy importantes son El contrato social y el Discurso
sobre el origen de la desigualdad entre los hombres.
El Contrato Social fue el manual de los doctrinarios de la Revolución
francesa. Emilio, o De la educación expone la
teoría que la pedagogía debe respetar los buenos instintos naturales del
hombre, guiando su libre desarrollo de la manera menos artificial posible. La
parte religiosa de Emilio, o De la educación titulada
"Profesión de foi du Vicaire Savoyard" irritó de inmediato al
parlamento de Paris, que lo consideró "impío, escandaloso y ofensivo"
por lo que Rousseau se vio obligado a huir de Francia para no acabar en la
cárcel……
En 1745, con 33 años, vuelve a París, donde presenta a
la Academia de Ciencias un Proyecto concerniente a nuevos signos para la
música, que es rechazado; compone la ópera Les Muses galantes, Mme. d´Épinay lo
introduce en el ambiente distinguido y es nombrado secretario de embajada en
Venecia. Cuando volvió a París en 1744, continuó su trato con Diderot y con
otros filósofos, como d´Alembert o Rameau, y su colaboración en artículos para
la Enciclopedia. Fue en esa época cuando conoció a Thérèse Levasseur, una
modista analfabeta con la que tuvo cinco hijos seguidos, a los que internaba en
la Maternidad pública, un hospicio, a medida que iban naciendo (Un contrasentido
para quien tanto escribió sobre la libertad en la educación de los niños.
Aunque daba la excusa de carecer de medios, en el volumen IX de sus Confesiones
afirma que era para separarlos del ambiente de incultura de la familia de su
mujer). Es en esta época cuando escribe sus escritos que le han hecho popular.
En 1754 regresó a Ginebra e intentó readquirir sus derechos como
ciudadano, se reconcilió con el calvinismo y escribió su discurso sobre la
desigualdad entre los hombres: Discurso sobre el origen y los fundamentos de la
desigualdad entre los hombres.
En 1756 se instaló en la residencia de su amiga Madame de Epinay, donde
se retiró para trabajar y escribir intensamente algunas de sus obras más
importantes.
Durante los años siguientes escribió La nueva Eloisa (1761), El contrato
social (1762), obra proscrita en Francia y finalmente, Emile, texto publicado
en 24 de mayo de 1762 y condenado a la hoguera, simultáneamente con el pedido
de captura del autor, que huyó a Neuchatel, en Suiza, donde es acogido como
protegido de Lord Keith, pero su casa en Môtiers es apedreada por una turba
furiosa en 1765.
Su amigo Hume lo acogió junto con Thérèse en Inglaterra, y vivieron
retirados en el campo durante dos años (1765-1767), debido a la opinión que la
mayoría de los ingleses tenía de él: un loco, malo y peligroso hombre que vive
en pecado con Thérèse. En 1767, con 55 años, volvió a Francia con un nombre
falso. Allí se casó con Thérèse un año más tarde. En 1770 se le permitió
regresar oficialmente con la condición de que no publicase nada más.
En París permaneció hasta 1778; vuelve a copiar música (de lo que
vivía), clasifica hierbas y escribe sobre botánica Mientras tanto publicó
Confesiones (1767-1771), escritas en buena parte durante su estancia en
Inglaterra, y escribe y no acaba Las meditaciones de un paseante solitario.
Escribió sus memorias, las Confesiones, y se dedicó a vivir de sus
patrones y lecturas públicas que hacía de ellas. En 1772 Madame d'Epinay,
escandalizada por lo que Rousseau relata de su relación con ella, pide a la
policía que prohíban tales lecturas. Con una salud mental resquebrajada
definitivamente, se alejó del mundo. Aunque siguió escribiendo, su salud mental
le hacía ver enemigos en todas partes y no pudo disfrutar de su fama.
En mayo de 1778, invitado por el marqués de Girardin,
se trasladó al pabellón situado frente al castillo de Ermenonville, en donde
falleció víctima de una apoplejía. El 9 de octubre de 1779, por decisión de la
Asamblea Constituyente, sus restos son trasladados al Panteón…..”
(https://www.educomunicacion.es/figuraspedagogia/0_juan_jacobo_rousseau.htm#:~:text=Jean%2DJacques%20Rousseau%20naci%C3%B3%20el,los%20principales%20representantes%20del%20movimiento.). También puede
verse:
(https://www.biografiasyvidas.com/biografia/r/rousseau_jeanjacques.htm);
(https://www.slideshare.net/zoraidacardona2/juan-jacobo-rousseau-76640126);
(https://www.expansion.com/2011/07/13/entorno/1310588728.html){
https://wsimag.com/es/cultura/42271-rousseau-un-legado-complejo-y-ambivalente, por Óscar
Álvarez Araya); (https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0718-43602012000100004, Jorge Vergara
Estévez);
(http://portal.amelica.org/ameli/jatsRepo/88/8835007/html/index.html, por Ana Loly
Hernández Zambrano); (https://www.youtube.com/watch?v=rxBAqIXdw64, Nicole
Nvarro); (https://www.youtube.com/watch?v=fRlsnkCwQ_4, La 8 León); (https://www.youtube.com/watch?v=pJ46xmN6Lc4, Claudio
Marcio);
Apéndice
Los hijos de J-J Rousseau, por Hoy
EN; https://hoy.com.do/los-hijos-de-j-j-rousseau/
“….Hasta su muerte, el abandono de los hijos le costó
mucho y como si no recordara su paternidad indigna e irresponsable publica
Emile ou l’Education (1762), un tratado que inició casi concomitantemente con
la redacción de Las confesiones…
Los exégetas de Jean-Jacques Rousseau, en particular sus
defensores, han tratado de justificar la conducta del reconocido filósofo y
escritor suizo del siglo XVIII a propósito de haber entregado sus hijos a la
asistencia pública de Francia. Entre los argumentos, el que más se utilizó fue
el de que Rousseau había sufrido enfermedades genitales que le habían dejado
estéril e impotente. Es decir, que los cinco niños que entregó a la institución
pública de París Les Enfants-Trouvés no eran suyos. Una defensa algo débil si
se toma en cuenta que ese acto se repitió cinco veces durante su relación con
Thérèse Levasseur, una hermosa mujer de condición social humilde que, desde
1745 hasta los últimos días del filósofo, compartió los triunfos y derrotas de
Jean-Jacques.
Es cierto que Thérèse tuvo algunos amantes, pero no se puede admitir, para
justificar lo indefendible, que Rousseau iba a aceptar un adulterio tan
repetido. Se ha establecido que el primer hijo de Thérèse y Rousseau debió
haber nacido hacia 1747. Ya en 1750 Roussseau da cuenta en Las confesiones,
libro VIII: “Mientras yo filosofaba sobre los deberes de los hombres [acababa
de obtener el premio de la Academia de Dijon con su Discurso sobre las ciencias
y las artes], un acontecimiento me llevó a reflexionar mejor sobre los míos,
Thérèse estaba encinta por tercera vez”. Y más adelante agrega: “Nunca un solo
instante de su vida Jean-Jacques ha sido un hombre sin sentimientos, sin
entrañas, un padre desnaturalizado. Pude equivocarme, pero no endurecerme. Si
dijera mis razones, diría demasiado. Como ellas me sedujeron podrían seducir a
muchos otros: no quiero exponer a los jóvenes que pudieran leerme a dejarse
engañar por el mismo error. Me contentaría con decir que fue tal que al
entregar mis hijos a la educación pública, a falta de poder educarlos yo mismo,
y destinarlos a convertirse en obreros y campesinos, antes que aventureros o
caza fortunas, me pareció hacer un acto de ciudadano y de padre; y me veía como
un miembro de la república de Platón. Más de una vez, desde entonces las
nostalgias de mi corazón me enseñaron que me había equivocado; pero, lejos de
las advertencias de mi razón, a menudo le he dado gracias al cielo haberlos
protegido de la suerte de su padre, y de aquella que les amenazaba cuando
hubiera estado obligado a abandonarlos”. Este es
el argumento de mayor validez para justificar el abandono de sus hijos.
Rousseau no quería asumir una responsabilidad moral. Se hicieron, al final de
la vida del filósofo y tiempo después, investigaciones para recuperar a los
niños, pero todas fueron infructuosas. Hay quienes llevan el argumento al
extremo y sentencian que esos niños eran pura invención de Jean-Jacques……
Sin embargo, a pesar de que la meta buscada en su obra era “en cierta forma hacer mi alma transparente ante los ojos del lector…” las explicaciones y argumentos por lo que el notable filósofo abandonó en Les Enfants-Trouvés sus cinco hijos no son convincentes. A través de las páginas de Las confesiones se siente que, a pesar de la escritura como liberación que ejerce la redacción de su vida, no logra deshacerse de ese fardo. La historia de Jean-Jacques Rousseau, según se desarrolla en esta magistral joya de la literatura francesa y universal, acomoda episodio, pero no deja de ser verdadera como el enciclopedista repite en numerosas ocasiones. Hasta su muerte, el abandono de los hijos le costó mucho y como si no recordara su paternidad indigna e irresponsable publica Emile ou l’Education (1762), un tratado que inició casi concomitantemente con la redacción de Las confesiones, que muchos historiadores consideran como su verdadero mea culpa ante el abandono de sus cinco hijos a la asistencia pública. Hoy no se juzga a Jean-Jacques por ese acto. No se ponen en duda sus reflexiones sobre la educación, pero no podemos dejar de preguntarnos ¿cómo es posible pensar en los demás y no en los suyos? ¡Vaya paradoja!...” También puede verse: (https://www.abc.es/historia/abci-cuando-voltaire-vengo-rousseau-publicando-gran-paradoja-vida-201806281706_noticia.html?ref=https:%2F%2Fwww.google.com%2F); (https://www.expansion.com/2011/07/13/entorno/1310588728.html); (https://www.animalpolitico.com/chismes-de-la-alta-sociedad/jean-jacques-rousseau-toda-una-fichita-2/, por Madame Currutaca); (https://www.libertaddigital.com/cultura/historia/2016-08-06/nuria-richart-rousseau-y-el-modelo-educativo-de-abandonar-cinco-hijos-1-79721/); (http://www.secst.cl/upfiles/documentos/01082016_923am_579f698613e3b.pdf); (https://www.biblioteca.org.ar/libros/130936.pdf).
EN: https://mailchi.mp/thedialogue/partners-in-progress-celebrating-a-year-of-regional-collaboration-at-the-dialogue?e=92d21b4a0e